Buenos días D. Carlos desde Londres, donde he tenido que
venir un par de días por motivos profesionales.
De camino hacia aquí comí en Bilbao con unos amigos. Hasta
allí les sorprendió el espectáculo del PNV de este fin de semana pasado en
Pamplona. Ambos presidentes (Urkullu y Ortuzar) custodiaban orgullosos a
nuestra AmadaLíder. Como una más. Como una de su casa.
Ya lo dijo Ortuzar: “No nos asusta el entendimiento con
Madrid, pero cada uno en su casa y desde su casa”. Y para ellos, Navarra, es la
despensa.
¡Si hasta los de Neguri se sorprenden, cómo no vamos a
inquietarnos D. Carlos!
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